domingo, 18 de octubre de 2009
Respetando las diferencias, por Sandra Engracial (Profesora de Educación Diferencial TEL - TEA)
El power point que se presenta a continuación fue realizado para trabajar con nuestros niños y niñas el respeto a la diversidad, con el fin de que éstos logren comprender que todos somos diferentes y que cada ser constituye un aporte a la sociedad a partir de su singularidad. Espero que este material sea una ayuda para los profesores y profesoras que trabajan por la valoración de la diversidad.
domingo, 11 de octubre de 2009
Láminas de Absurdos Visuales (Material aportado por Claudia Gili, Educadora Diferencial)
La capacidad de reconocer y reparar absurdos verbales es parte de las habilidades del lenguaje que deben desarrollar los niños y niñas, por tal motivo, éste es uno de los aspectos que se trabaja con los alumnos y alumnas que presental TEL en las escuelas de lenguaje. A continuación se presenta parte de un material que permite trabajar dicho aspecto de manera visual y que además posibilida estimular la atención y descripción de láminas.
Debido a que el material presentado es sólo una parte de éste, se invita a los interesados e interesadas a acceder al resto del material a través del contacto genrandoredes@gmail.com
Déficit Visual, por Macarena Vidal (Profesora de Educación Diferencial Especialista en Trastornos de la Visión, UMCE)
Ciego es una persona que tiene visión cero o que “sólo tiene una mínima percepción de luz” (Colembrander). En la ceguera absoluta o total no se distingue luz de oscuridad.
La vista es el sentido de la síntesis. Ello significa que cuando se entra a una habitación, por ejemplo la información residual recibida proporciona rápidamente datos referentes a dimensiones, objetos o personas presentes, distancias relativas entre ellos, presencia o ausencia de luz, etc. La persona que carece de visión, necesita analizar para conocer. A través de la información que le proporcionan los otros sentidos construyen la realidad. Sin embargo, hay nociones que por ser exclusivamente visuales no logra aprehender: Los colores, el horizonte, las estrellas. No obstante lo anterior, de ningún modo significa que la persona ciega tenga un conocimiento “inferior” o “fragmentario”, sino que conoce de forma diferente privilegiando el sentido del tacto (sentido de inmediatez, como el olfato y el gusto) y del oído. Al respecto, existe la creencia que la persona ciega tiene “más desarrollados” los otros sentidos. Esto no es así, la agudización de la percepción táctil, por ejemplo, es el resultado de la ejercitación y no de una compensación espontánea. Por ello, es importante estimular al niño ciego ya desde su nacimiento, a fin de proveerlo de experiencias ricas, variadas, con significado, que le ayuden a crecer sano. Es vital enseñarle a explorar el espacio, a no temer el movimiento.
En la etapa adulta, muchas de las personas que adquieren ceguera pueden encontrar que su entorno se ha tornado hostil: Ya no saben que es lo que hay cerca, temen movilizarse solos, sus desplazamientos se vuelven experiencias de tensión y miedo. En cambio, el ciego de nacimiento que ha sido estimulado, tiene una relación positiva con el espacio y el movimiento, presentando por ende, una mayor adaptación.
Una persona con baja visión es “quién aún después de un tratamiento y/o refracción convencional tiene en su mejor ojo una agudeza visual de 3/10 hasta la visión luz y/o un campo visual menor o igual a 20 grados, pero que usa o es potencialmente capaz de usar su visión para la planificación o ejecución de una tarea” (Organización Mundial de la Salud). Para comprender este concepto es necesario saber que la agudeza normal es de 10/10 mientras que los límites del campo visual son 90º en la parte externa o temporal, 60º en la interna o nasa, 50º en la parte superior y 70º en la inferior.
De la definición otorgada anteriormente se puede señalar al respecto, que existen variados tipos de baja visión. Todo ello va a depender del grado de agudeza y eficiencia visual que tenga en funcionamiento la persona. Tal como lo dice Natalie Barraga (pionera indiscutible en el área de la estimulación visual) diferencia claramente agudeza de eficiencia, definiendo a esta última como el “grado en el que una tarea visual específica se realiza con comodidad, facilidad y en tiempo mínimo, dependiendo de variables personales y ambientales”.
En cuanto al campo visual, la persona puede tener una merma a nivel central, lo que le provocará dificultades para leer pero no para caminar o puede tener limitaciones a nivel periférico, en cuyo caso podrá leer pero estará muy limitado en su deambular. Puede también ver como a través, de un tubo, o por sectores. Estas personas tienen un comportamiento visual que a los demás resulta extraño, ya que podrán tropezar con un banco que tienen delante y distinguir perfectamente un lunar en el rostro de alguien. Hay quienes ven diferente según las condiciones de luminosidad prefiriendo el día (como en el caso de la ceguera nocturna) o la noche (como en el caso de las personas que sufren fotofobia).
Archivos de utilidad sobre el tema:
*Imagén sacada de atenciontemprana06.blogspot.com
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